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TOMBSTONE, Arizona – «¡Bang!» «¡Bang!» «¡Bang!»
Y varios «¡bangs!» más. – los disparos en este tiroteo recreado sucedieron tan rápido que no pude llevar la cuenta.
«Eso fue todo», dijo el actor que interpreta al agente de la ley Doc Holliday en el espectáculo que se realiza varias veces al día en el OK Corral sobre el que puede ser el tiroteo más famoso del Viejo Oeste. «Se acabó antes de que empezara».
Recién llegado a Arizona, había llevado a mi mujer y a mis hijos pequeños a Tombstone, a unas tres horas en coche al sureste de Phoenix, para conocer algo de la historia del estado. Pensé que los vaqueros y los tiroteos serían más interesantes para mis hijos de 8 y 9 años que los museos.
Pero el tiroteo terminó tan rápido que no pude evitar preguntarme: «¿Por qué es esto un gran problema?»
Hay numerosas películas y libros sobre este suceso, y el nombre «Tombstone» puede ser uno de los más reconocidos del mundo. Pero sólo tres personas murieron en el tiroteo de 1881, lo que parece pintoresco en el mundo actual de los tiroteos masivos. Y cuando veas la recreación, no se te podrá culpar por pensar en esas viejas películas, con sus prolongados tiroteos y sus gallardos caballos, y concluir que eran un montón de estiércol de vaca.
Si vas
- De noviembre a mayo son los mejores meses, ya que el verano es muy caluroso.
- Si planeas visitarlo con niños, ten en cuenta sus edades. Nuestros hijos mayores disfrutaron de Tombstone. Nuestro hijo de 3 años se asustó con los disparos.
- Las opciones de alojamiento en Tombstone son limitadas, pero hay muchos hoteles a 30 minutos en coche.
Un rápido resumen del conflicto básico: Un grupo de forajidos armados, llamados vaqueros, se enfrentan a tiros con el alguacil del pueblo y un puñado de policías, culminando una disputa en parte personal, en parte legal, y que habla del futuro de un pueblo.
Tim Christie, el actor que interpreta a Holliday, dijo que gran parte de la intriga proviene de indagar en los personajes y darse cuenta de que no había buenos.
«Todos eran malos. Todo el mundo tenía una agenda», dijo Christie, que también es el gerente y director del espectáculo.
Tombstone es hoy una mezcla de autenticidad y turismo con una fuerte dosis de queso. Además del espectáculo del OK Corral, hay otros tiroteos recreados en las calles. En la parte antigua del pueblo, los escaparates y las calles de tierra tienen el mismo aspecto que cuando se fundó y floreció la ciudad a finales del siglo XIX.
«¡Todo esto parece una película!», dijo mi hijo de 9 años mientras las mujeres con vestidos largos y completos y los hombres con sombreros de vaquero y espuelas pasaban por delante de nosotros.
Las tiendas venden botas de cuero, lassos y pistolas de juguete. Los niños «buscan plata» con bolsas de tierra mezcladas con piedras brillantes. Grandes y coloridos carruajes pasan zumbando, y hay varios salones para explorar junto con «cribs», donde vivían y trabajaban las prostitutas.
Jeremy Johnston, historiador del Buffalo Bill Center of the West, en Cody, Wyoming, dijo que la glamorización del pueblo y del tiroteo comenzó en la década de 1930 después de que Stuart Lake publicara «Wyatt Earp: Frontier Marshal», una biografía en gran parte ficticia que presentaba a Earp como un valiente agente de la ley. Eso dio lugar a varias películas y series de televisión en las décadas siguientes.
Johnston dijo que el tiroteo fue una gran noticia a nivel local en ese momento, pero había tantos otros conflictos en la zona -guerras de los indios apaches, disputas mineras, huelgas violentas- que habría sido una de las muchas cosas.
El tiroteo en Tombstone no ocurrió en realidad en el OK Corral, sino frente al estudio fotográfico de C.S. Fly en la calle Fremont, varias puertas más abajo de la entrada trasera del corral.
La cultura popular ha convertido el tiroteo en «una historia de buenos y sólidos ciudadanos que se enfrentan a rufianes para construir una buena comunidad», dijo Johnston, y añadió que «ignora muchos matices».»
Dusty Escapule, alcalde de Tombstone y residente de cuarta generación, dijo que la ciudad está trabajando para añadir atracciones más allá de los tiroteos.
«Los tiroteos no serán interesantes para las generaciones más jóvenes», dijo, y añadió que ha visto a los padres apartar a sus hijos cuando comienza un tiroteo de recreación porque no quieren que lo vean.
Escapule señaló las exposiciones mineras de la ciudad, los paseos en diligencia y las visitas nocturnas a los fantasmas como ejemplos de actividades no relacionadas con las armas de fuego.
Eso no quiere decir que la ciudad de 1.290 habitantes se esté alejando de su historia de armas. En algunos aspectos, la está abrazando aún más. En 2017, Escapule firmó una proclamación que declaraba a Tombstone «Ciudad de la Segunda Enmienda de Estados Unidos». La medida era puramente simbólica, ya que Arizona permite a los residentes, e incluso a los visitantes de otros estados, llevar armas ocultas.
«Quería que la gente supiera que creemos en los derechos de los ciudadanos a portar armas», dijo Escapule.
Históricamente, una de las disputas centrales que condujeron al famoso tiroteo fue la contención por parte de los agentes de la ley de que otros, es decir, los vaqueros, no deberían poder llevar armas en la ciudad. Hoy en día, muchos comercios tienen carteles en la puerta que dicen: «No se permiten armas en el interior» (los negocios privados en Arizona pueden prohibir las armas en sus locales).
Una atracción que ofrece a los visitantes una amplia visión del pueblo es el «historama» de Tombstone, que se muestra en el OK Corral. Narrado por el difunto actor Vincent Price, explica cómo surgió el pueblo y obtuvo su macabro nombre: a Ed Schieffelin, un buscador de plata, un amigo le dijo algo así como que las únicas piedras que encontraría (en un territorio con apaches) serían su propia lápida. Cuando Schieffelin presentó su primera solicitud de explotación minera en 1877, naturalmente la llamó «Tombstone».
Entre otras cosas, el historiador relata los incendios que destruyeron la ciudad y la rápida reconstrucción después de cada incendio, lo que dio lugar al apodo de «La ciudad demasiado dura para morir».
Si hay algo en Tombstone que se siente en línea con todas las películas del Viejo Oeste, es el paisaje. El pueblo, a menos de 80 kilómetros al norte de la frontera entre Estados Unidos y México, está en medio de un desierto, con cactus, salvia y tierra que se arremolina en polvo. Los veranos son brutalmente calurosos.
Visitando Tombstone, entendí por qué capturó la imaginación estadounidense, aunque su reputación se basara más en la imaginación que en la historia. La dureza del terreno, el atractivo de las riquezas de la noche a la mañana para los buscadores arriesgados, la batalla contra la anarquía.
Y aunque los problemas de control de armas puedan cambiar la forma en que la gente ve el Viejo Oeste, la narrativa del bien contra el mal seguirá inspirando.
Ciertamente lo hizo para Christie, el director del espectáculo. Ahora, con 25 años, empezó a interpretar a un vaquero más joven en el espectáculo cuando tenía 12 años.
«En mi infancia, soñaba con vaqueros», dijo Christie, fumando un cigarrillo entre actuaciones. «Ahora interpreto a uno en un espectáculo»
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