La tiroides es una glándula ubicada en la base del cuello, por delante de la tráquea. Es la encargada de llevar el ritmo del metabolismo del organismo.
¿Cuáles son las enfermedades más frecuentes de la tiroides?
• HIPOTIROIDISMO
Si la tiroides tiene una disminución de su actividad produce una cantidad insuficiente de hormona tiroidea, provocando un trastorno denominado hipotiroidismo que ralentiza el metabolismo y por ende la energía de la persona que lo padece.
Algunos síntomas pueden o ser muy vagos (hipotiroidismo subclínico) o aparecer en el transcurso de un período prolongado de tiempo, siendo similares a otros problemas médicos comunes y a los signos del envejecimiento, por lo que es frecuente que la enfermedad pase desapercibida. Pero si la patología no se trata puede causar complicaciones graves y potencialmente fatales. Además, se acompaña de una mayor hipertensión y niveles de colesterol elevados e infertilidad.
Entre los síntomas más comunes encontramos:
- Fatiga, somnolencia y/o debilidad.
- Intolerancia al frío.
- Pérdida de memoria.
- Aumento de peso o mayor dificultad para adelgazar (a pesar de una dieta y ejercicio razonables).
- Depresión.
- Constipación.
- Menstruaciones anormales y/o problemas de fertilidad.
- Dolor articular o muscular.
- Cabello o uñas finos y quebradizos y/o piel seca y descamada.
• HIPERTIROIDISMO
Sin embargo, si la tiroides tiene una actividad excesiva, produce demasiada hormona tiroidea que pasa al torrente sanguíneo, provocando una afección llamada hipertiroidismo (no tan común como el hipotiroidismo), que acelera el metabolismo de la persona que lo padece.
Los síntomas claves son:
- Pérdida de peso aunque la persona se alimente normalmente
- Ansiedad e irritabilidad
- Frecuencia cardíaca acelerada
- Ojos prominentes
- Temblores
- Caída de cabello
- Sensación de debilidad
- Aumento de la frecuencia de las deposiciones
- Rápido crecimiento de las uñas
- Piel fina y lisa
- Sudoración mayor a la normal
- Menstruaciones anormales
El hipertiroidismo no tratado puede provocar desde una arritmia hasta ataques al corazón. Además, si sos mujer y pasaste la menopausia, tené en cuenta que el hipertiroidismo aumenta tu riesgo de presentar osteoporosis y fracturas.
Consecuencia de la disfunción tiroidea
Tanto en el hipotiroidismo como en el hipertiroidismo la glándula tiroides puede aumentar de tamaño más de lo normal volviéndose visible o palpable bajo la piel en la parte anterior del cuello (médicamente se le llama «bocio»).
La vivencia de cada persona de sus problemas tiroideos es única y no todas las personas presentarán todos los síntomas asociados con la enfermedad.
Consultá a tu médico por más información.