En 1965, 20 años después del final de la guerra, se creó el Sitio conmemorativo del campo de concentración de Dachau en el emplazamiento del antiguo campo de concentración. Además de los lugares auténticos de las atrocidades, este museo, archivo y biblioteca recuerdan a sus más de 600.000 visitantes anuales a las víctimas del terror nazi.
Campo de Concentración de Dachau
En 1933, año en que Hitler se proclamó canciller, Heinrich Himmler dio órdenes de construir el campo de Dachau, convirtiéndolo en el primer campo de concentración de Alemania. El principal responsable de la organización del campo, que sirvió de modelo para todos los campos de concentración posteriores, fue el comandante Theodor Eicke, que describió el campo como una «escuela de violencia» para los miembros de las SS.
Al principio, eran principalmente los prisioneros políticos los que eran internados en el campo de concentración de Dachau, pero con la introducción de las leyes de Nuremberg sobre la discriminación racial en 1935, la red se amplió para incluir a grupos como los inmigrantes, los homosexuales, los testigos de Jehová y, a partir de 1938, los sinti y los gitanos y los prisioneros de guerra. Entre 1933 y 1945, más de 200.000 prisioneros de 34 países fueron capturados por los nazis y retenidos en el campo de concentración de Dachau.
El 29 de abril de 1945, el campo fue finalmente liberado por el ejército estadounidense.
Establecer el sitio conmemorativo del campo de concentración de Dachau
Después de la guerra, el sitio del campo de concentración fue utilizado inicialmente por los aliados como una prisión y un centro de recepción para los refugiados sin hogar. En 1965, una iniciativa sugerida por antiguos prisioneros diez años antes en el «Comité Internacional de Dachau» se materializó finalmente en forma de un sitio conmemorativo. La financiación corrió a cargo del Estado Libre de Baviera.
Los visitantes pueden ver una exposición permanente en el museo, el búnker (que fue una prisión en el antiguo edificio de la granja), un barracón de la prisión reconstruido y el crematorio. La capilla católica de la Agonía, la iglesia evangélica de la Reconciliación, un lugar conmemorativo judío y el «Cenotafio Internacional» erigido en el antiguo campo de concentración en 1968 por el escultor Nandor Glid sirven para recordar.