Reabsorción

En fisiología renal, la reabsorción o reabsorción tubular es el proceso por el cual la nefrona elimina agua y solutos del líquido tubular (preurinario) y los devuelve a la sangre circulante. Se denomina reabsorción (y no absorción) tanto porque estas sustancias ya han sido absorbidas una vez (sobre todo en los intestinos) como porque el organismo las está recuperando de un flujo de líquido postglomerular que va camino de convertirse en orina (es decir, que pronto se perderán en la orina si no son recuperadas). Las sustancias se reabsorben desde el túbulo hacia los capilares peritubulares. Esto ocurre como resultado del transporte de sodio desde el lumen a la sangre por la Na+/K+ATPasa en la membrana basolateral de las células epiteliales. De este modo, el filtrado glomerular se vuelve más concentrado, lo que constituye uno de los pasos para la formación de la orina. La reabsorción permite que muchos solutos útiles (principalmente glucosa y aminoácidos), sales y agua que han pasado por la cápsula de Bowman, vuelvan a la circulación. Estos solutos se reabsorben de forma isotónica, ya que el potencial osmótico del líquido que sale del túbulo contorneado proximal es el mismo que el del filtrado glomerular inicial. Sin embargo, la glucosa, los aminoácidos, el fosfato inorgánico y algunos otros solutos se reabsorben mediante un transporte activo secundario a través de canales de cotransporte impulsados por el gradiente de sodio.

Sistema renina-angiotensina:

• Los riñones detectan la presión arterial baja.
• Liberan renina en la sangre.
• La renina provoca la producción de angiotensina I.
• La enzima convertidora de angiotensina (ECA) convierte la angiotensina I en angiotensina II.
• La angiotensina II estimula la liberación de aldosterona, ADH y sed.
• La aldosterona hace que los riñones reabsorban el sodio; la ADH aumenta la captación de agua.
• El agua sigue al sodio.
• A medida que aumenta el volumen sanguíneo, también aumenta la presión.
• La aldosterina II estimula la liberación de agua.