Indicadores de práctica
En todo el mundo, 10,2 millones de niños menores de cinco años mueren cada año, y la diarrea causa aproximadamente una quinta parte de estas muertes.2 Aproximadamente la mitad de las muertes por diarrea son causadas por una diarrea persistente que dura más de dos semanas.1 Una nutrición e hidratación adecuadas, una buena higiene, agua limpia, la vacunación contra el rotavirus y la lactancia materna son factores importantes para prevenir o mitigar la diarrea. Los antibióticos rara vez son útiles.3
Los probióticos son microorganismos que han demostrado prevenir y reducir la duración de la enfermedad en niños con diarrea aguda.3 L. rhamnosus GG es el preparado más estudiado. Menos estudios han examinado los efectos de los probióticos en la diarrea persistente.
Los autores de esta revisión Cochrane analizaron cuatro ensayos controlados aleatorios que comparaban un agente probiótico específico con placebo en niños con diarrea persistente que se consideraba infecciosa. Se excluyeron los pacientes con enfermedad diarreica crónica por otras causas, como los síndromes de malabsorción. Los cuatro ensayos controlados aleatorios incluyeron a 464 niños de la India, México, Argentina y Argelia. Sólo uno de estos estudios fue de alta calidad y se consideró de bajo riesgo de sesgo. En este estudio de 235 niños hospitalizados en la India, la mitad de los cuales fueron asignados al azar para recibir L. rhamnosus GG, la duración de la enfermedad diarreica se redujo en cuatro días en el grupo probiótico.4 La estancia media en el hospital se redujo en ocho días. No se notificaron efectos adversos.
Unos pocos estudios han notificado efectos adversos de los probióticos. Un estudio de adultos mostró un aumento de la mortalidad en pacientes con pancreatitis aguda que recibieron probióticos.5 Un estudio alemán de mujeres embarazadas que recibieron suplementos de Lactobacillus durante el período perinatal para prevenir la dermatitis atópica en los bebés mostró un aumento de las tasas de bronquitis sibilante en los bebés de las mujeres tratadas.6 Sin embargo, los probióticos parecen tener pocos efectos adversos en personas por lo demás sanas.1,3,7
La evidencia de calidad variable muestra que los probióticos también son beneficiosos para la diarrea asociada a los antibióticos, la diarrea del viajero, el síndrome del intestino irritable, la enfermedad inflamatoria intestinal y el cólico infantil.7,8