Factores de la granja
Proveer alimentos seguros y saludables es la responsabilidad más importante de la industria porcina. Garantizar la seguridad alimentaria de la carne de cerdo es una tarea compleja que requiere ser consciente del papel que todos desempeñan en la cadena alimentaria. En la granja, son muchos los factores que pueden afectar a la seguridad de la carne de cerdo, por lo que las operaciones agrícolas actuales emplean una amplia variedad de tecnología y técnicas para minimizar las amenazas a la seguridad alimentaria.
Se puede decir que Estados Unidos tiene la cadena de suministro de alimentos más segura del mundo como resultado de las normas y reglamentos que se mantienen diligentemente para proteger a los consumidores. El gobierno de EE.UU. presta servicios en las áreas de inspección, educación, recopilación de datos, investigación y seguridad a nivel federal, estatal y local. En particular, el Servicio de Inspección y Seguridad Alimentaria (FSIS) del Departamento de Agricultura de EE.UU. desempeña un papel fundamental para garantizar la seguridad del suministro comercial de carne de cerdo en EE.UU.
Las nuevas tecnologías y la adopción de métodos científicamente sólidos nos ayudan a prevenir y minimizar las amenazas a la seguridad alimentaria. Uno de los avances más importantes para mejorar la seguridad alimentaria es el cambio de la cría de cerdos al aire libre a la cría en interiores.
Las principales razones por las que la seguridad alimentaria de la carne de cerdo mejora al alojar a los cerdos en el interior:
- Las naves están diseñadas y mantenidas para mantener alejados a los depredadores, parásitos y alimañas – vitales para la prevención de lesiones y enfermedades de los cerdos
- El pienso y el agua son menos susceptibles de ser contaminados
- El control del clima evita las fluctuaciones dramáticas de la temperatura que pueden tener un impacto negativo en la salud de los cerdos en las distintas etapas de su vida
- Las instalaciones tienen prácticas estrictas de bioseguridad para ayudar a asegurar que las enfermedades no se introducen accidentalmente en los animales; las instalaciones al aire libre son mucho más difíciles de controlar en este sentido. Por ejemplo, se puede exigir a los visitantes que firmen a la entrada y a la salida, que indiquen cuándo fue la última vez que visitaron otra granja, que lleven botas y monos especiales e incluso que se duchen antes de entrar y se duchen al salir. Estos protocolos de seguridad conducen a cerdos más sanos y a un suministro de alimentos más seguro.
- La verdad sobre la triquinosis
Muchos creen que deben cocinar la carne de cerdo hasta que esté bien cocida. Según el USDA, eso no es necesario. La noción de que la carne de cerdo debe cocinarse bien hecha se remonta a unas cuantas generaciones atrás, cuando un patógeno llamado Trichinella spiralis que causa la triquinosis era un problema para los criadores de cerdos y para los consumidores. Hoy sabemos que la Trichinella spiralis se transmite a los cerdos como resultado de unas prácticas de alimentación deficientes y de la exposición a animales infectados por el patógeno.
Eliminación de la triquinosis
Las medidas de bioseguridad en las explotaciones porcinas se han vuelto muy sofisticadas y eficaces. La adopción generalizada de mejores prácticas de alimentación y altos niveles de bioseguridad e higiene han eliminado prácticamente la presencia de triquinas en Estados Unidos. Dado que la mayoría de los cerdos criados para la alimentación hoy en día se alojan en establos en lugar de al aire libre, los trabajadores de las instalaciones pueden gestionar cuidadosamente la bioseguridad de los establos para ayudar a mantener alejados a los patógenos causantes de enfermedades. Ahora que el parásito relacionado con la triquinosis está prácticamente eliminado, el riesgo de triquinosis de la carne de cerdo estadounidense también lo está.
Naturalmente, queremos defendernos de cualquier amenaza de enfermedad para nuestros cerdos, trabajadores o el público. Algunas enfermedades que son amenazas significativas para los cerdos no suponen una amenaza para los humanos y, por lo tanto, son desconocidas para muchas personas. Las enfermedades pueden introducirse en una granja de muchas maneras: a través del contacto físico con otro animal, una persona o un objeto inanimado (como la ropa, el agua o el suelo), o a través de la inhalación de gérmenes que flotan en el aire. Debido a esta realidad, la bioseguridad es un proceso continuo que comprende varias prácticas de gestión diseñadas para minimizar o, siempre que sea posible, prevenir la introducción de enfermedades en una granja.
1Cálculo realizado por el National Pork Board basado en las estadísticas de la Oficina del Censo de Estados Unidos, 2009.