El Motor Analítico fue, o habría sido, el primer ordenador de propósito general del mundo. Diseñada en la década de 1830 por el matemático e inventor inglés Charles Babbage , la Máquina Analítica introdujo una serie de conceptos informáticos que todavía se utilizan hoy en día. Sus características incluían un almacén y un molino, análogos a la memoria y el procesador actuales. La entrada y la salida se realizaban mediante tarjetas perforadas, basadas en la invención de Jacquard a principios del siglo XIX.
Babbage comenzó a trabajar en la Máquina Analítica en 1834. Pretendía que el ordenador se construyera con accesorios de latón y fuera impulsado por vapor. Nunca se construyó, ya que el gobierno de la época no estaba dispuesto a financiar su construcción, pues ya había invertido 17.000 libras esterlinas en el infructuoso proyecto de Babbage de construir un invento anterior, la Máquina Diferencial.
Babbage contó con la ayuda de Ada Augusta, condesa de Lovelace (e hija del poeta Byron), a quien se considera la primera programadora de ordenadores del mundo por su trabajo con Babbage. Desarrolló un programa de tarjetas perforadas para calcular los números de Bernoulli.
Mientras que la anterior Máquina Diferencial de Babbage se construyó finalmente en 1991, su Máquina Analítica sigue sin realizarse. Sin embargo, como creador de varios conceptos importantes de la computación, el lugar de Babbage en la historia está asegurado.