La vitamina del sol

En medio de nuestros veranos del Norte, cuando muchos de nosotros nos tomamos vacaciones, pasamos tiempo en la playa y nos empapamos de los rayos del sol, el sol nos ayuda a producir vitamina D, también conocida como la vitamina del sol. Pero nuestra exposición al sol en el Norte probablemente no sea suficiente.

Hay muchos comentarios sobre los beneficios de la vitamina D en estos días, incluyendo estudios que sugieren que la vitamina D puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar una serie de condiciones crónicas, incluyendo algunos tipos de cáncer. El importante papel que desempeña la vitamina D en la salud de los huesos es bien conocido. Es necesaria para la absorción del calcio y ayuda a mantener los niveles de fósforo en sangre, otro ingrediente importante para la salud de los huesos. Sin esta importante vitamina, corremos un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis y fracturas óseas. Investigaciones recientes han descubierto pruebas convincentes de que la vitamina del sol puede estar relacionada con un menor riesgo de muerte por causas cardiovasculares, un pronóstico más positivo para los pacientes de cáncer de mama, un menor riesgo de esclerosis múltiple e incluso una disminución de las afecciones mentales como la esquizofrenia y la depresión. Aunque la mayoría de estos nuevos datos proceden de estudios observacionales, los indicios son lo suficientemente prometedores como para justificar la atención.1

La vitamina D y las enfermedades gastrointestinales

La vitamina D es una vitamina liposoluble y esto es de especial interés en el tracto gastrointestinal. Si se padece una enfermedad intestinal, se puede tener dificultad para absorber las grasas de la dieta y, por tanto, se corre un mayor riesgo de padecer una deficiencia de vitamina D. Esta vulnerabilidad incluye a las personas con la enfermedad de Crohn, la enfermedad celíaca no tratada, la insuficiencia de enzimas pancreáticas y las personas a las que se les han extirpado ciertas secciones del intestino.14 Otra área gastrointestinal en la que los niveles de vitamina D entran en juego es en la reducción del riesgo de cáncer de colon y en la prolongación de la vida de los pacientes con cáncer de colon. El cáncer de colon es el tercer cáncer más común y la segunda causa de muerte por cáncer tanto en hombres como en mujeres.2

La dieta es probablemente el factor más importante cuando se trata de cáncer de colon. Las dietas ricas en grasas y carnes rojas se asocian a un mayor riesgo de cáncer de colon, mientras que las dietas ricas en fibra, calcio, frutas y verduras ayudan a prevenir el cáncer de colon.3 Durante más de 20 años, los estudios han demostrado que la vitamina D ofrece cierta protección contra el cáncer de colon. Por ejemplo, en 1996, investigadores de Harvard demostraron que los niveles más altos de vitamina D en el torrente sanguíneo reducían el riesgo de cáncer de colon. De hecho, los hombres con la mayor ingesta total de vitamina D tenían aproximadamente un 50% menos de probabilidades de desarrollar cáncer de colon en comparación con los hombres que tenían la ingesta total más baja.4 Otros estudios realizados desde entonces han respaldado estos hallazgos.

¿Qué ocurre con los pacientes que ya tienen cáncer de colon? ¿Les proporciona la vitamina D algún beneficio? Sí. Un estudio reciente realizado por el Instituto del Cáncer Dana-Farber y la Escuela de Salud Pública de Harvard ha demostrado que los pacientes con cáncer de colon que tienen altos niveles de vitamina D tienen un menor riesgo de muerte en comparación con los pacientes que tienen una deficiencia de vitamina D.5 Esta evidencia sugiere que la vitamina D podría proteger contra el cáncer de colon y podría ayudar a prolongar la vida de los que tienen cáncer de colon.6

Conseguir suficiente vitamina D

La vitamina D debe ser una parte importante de su dieta diaria. Sin embargo, como verá en la tabla adjunta, podría ser un reto asegurar cantidades suficientes de vitamina D a partir de fuentes dietéticas limitadas, como la leche fortificada, las setas Shiitake y algunos tipos de pescado.

Aunque los seres humanos pueden sintetizar la vitamina D a partir de la exposición directa a la luz solar, las investigaciones realizadas hasta la fecha son inadecuadas para producir directrices claras, ya que la época del año, la latitud geográfica, la hora del día, la nubosidad, el smog, el tipo de piel y el uso de protectores solares se encuentran entre la multitud de factores que afectan a la síntesis de la vitamina D.7

Las personas que viven en Canadá producen poca o ninguna vitamina D de octubre a marzo porque los rayos UV del sol son insuficientes para la síntesis de vitamina D.8 Esto no debería ser un problema durante los meses de verano, ¿verdad? Pues bien, aunque es cierto que el sol es lo suficientemente fuerte durante el verano para ayudarnos a producir vitamina D, hay otras consideraciones que hay que tener en cuenta. Tanto la Sociedad Canadiense del Cáncer como la Asociación Canadiense de Dermatología recomiendan el uso de protectores solares y no exponerse al sol durante las horas del mediodía, cuando los rayos solares son más fuertes, para reducir el riesgo de cáncer de piel.9,10 Estas recomendaciones reducen el potencial de producción de vitamina D. La protección solar SPF 15 reduce la producción de vitamina D en un 99%.11 La Sociedad Canadiense del Cáncer y la Asociación Canadiense de Dermatología reconocen la importancia de la vitamina D. Ambas organizaciones recomiendan un suplemento de vitamina D que contenga 1.000 UI.12,13

La vitamina D ha demostrado sus beneficios para la salud en relación con el cáncer de colon, y algunas personas con enfermedades gastrointestinales podrían correr el riesgo de una mayor disminución de esta vitamina. Discuta el uso de suplementos de vitamina D con sus profesionales de la salud. La vitamina D no es el único factor de protección contra las enfermedades, por lo que cualquier suplemento debe formar parte de una dieta saludable, supervisada por su profesional sanitario.

Tabla adaptada de Health Canada 2004 y Holick, MF 2007.

† 1 ųg (mcg) = 40 UI de vitamina D, cuando se utilizan los términos calciferol o ergocalciferol, el producto suele contener vitamina D2; cuando se utiliza el término colecalciferol, el producto suele contener vitamina D3

*La leche de vaca no se recomienda para niños de 9 a 12 meses de edad

**Las bebidas vegetarianas son alternativas inadecuadas a la leche materna, la leche artificial o la leche de vaca durante los dos primeros años de vida

Precaución

En una actualización de la información publicada en 2007, el Ministerio de Salud de Canadá advirtió a los canadienses de los riesgos para la salud asociados a la ingesta de demasiada vitamina D. El nivel de ingesta máxima tolerable de vitamina D para adultos establecido por el Ministerio de Sanidad de Canadá es de 2000 UI/día procedentes de todas las fuentes de vitamina D, incluida la leche y los suplementos de venta libre.14 Consulte a su profesional de la salud para obtener más información sobre la vitamina D. Debe tener en cuenta las siguientes interacciones notificadas con la vitamina D, en relación con los trastornos digestivos:

• Tomar laxantes estimulantes puede perjudicar la absorción de la vitamina D en la dieta,
• Tomar antiácidos que contienen magnesio con vitamina D puede aumentar el riesgo de niveles altos de magnesio en sangre, lo que podría provocar debilidad muscular y confusión,
• Tomar colestiramina (Questran®), un aglutinante de sales biliares, puede disminuir la absorción intestinal de la vitamina D, y
• si está tomando medicación con corticosteroides, puede necesitar suplementos adicionales de vitamina D para hacer frente a la disminución del calcio.15