29 de abril de 2016 3:31 pm Publicado por Riverstone Dental Care
¿Te has preguntado alguna vez de qué están hechos tus dientes? Se parecen a los huesos, pero en realidad son sustancialmente diferentes de los huesos en algunos aspectos. La parte exterior de su diente se llama esmalte. Es el mineral blanco y duro como una roca que protege los dientes. La siguiente capa se llama dentina y está formada por células vivas que segregan una sustancia mineral dura. En el centro del diente se encuentra la pulpa, donde viven los vasos sanguíneos y los nervios. Una buena higiene bucal es un componente clave para el bienestar físico general.
Tu diente está conectado a tu hueso maxilar por la raíz. En la raíz hay una parte del diente llamada «conducto radicular». Este es el camino para que los nervios y los vasos sanguíneos bajen por el diente y lleguen al hueso de la mandíbula. Cuando alguien se somete a una «terapia de conducto radicular», significa que el dentista está limpiando la pulpa profunda infectada del diente dentro del conducto radicular y lo rellena para asegurar que el resto del diente no se decaiga y se vea comprometido.
¿Por qué los dientes no se consideran huesos?
El esmalte es la sustancia más mineralizada de todo el cuerpo. Cubre todos y cada uno de los dientes, y está compuesto por minerales, en su mayoría hidroxiapatita. La hidroxiapatita se conoce como mineral óseo, pero es la hidroxiapatita carbonatada y carente de calcio la que compone el esmalte y la dentina dental.
Los huesos están formados por una proteína, el colágeno, que es un tejido vivo y en crecimiento. Esto es lo que permite a los huesos soportar la presión y les da un marco flexible. Los huesos también contienen osteoblastos, que son células que pueden producir el crecimiento y la reparación de nuevos huesos. Es posible que hayas notado que tus dientes no pueden regenerarse por sí mismos. Una vez que ha desarrollado una caries, no hay forma de que su diente se repare por sí mismo. Los huesos también tienen una médula ósea que produce glóbulos blancos y rojos. Los dientes no producen ninguna célula sanguínea.
Los dientes son fuertes pero delicados
Aunque tus dientes están cubiertos con el mineral más fuerte y duro de tu cuerpo, puede ser fácilmente descompuesto por el azúcar o la falta de higiene oral. Escatimar en el cepillado, en el uso del hilo dental y en la realización de limpiezas dentales periódicas te llevará a padecer caries, enfermedades de las encías y, potencialmente, a perder los dientes. Tus dientes son fuertes, pero tienes que cuidarlos. Hasta que descubramos poderes regenerativos para sus dientes, ¡son los únicos que tendrá!
Asegúrese de mantener sus dientes y encías saludables programando una cita en Riverstone Dental Care. Nuestro experimentado equipo dental se asegurará de que tengas una sonrisa sana y brillante que te dure toda la vida.
¡Pide una cita hoy!
Contacta con nosotros
Categorizado en: Cuidado dental familiar, Odontología general
Este post fue escrito por Riverstone Dental Care