La atorvastatina es un fármaco destinado a reducir los niveles anormalmente elevados de colesterol en nuestra sangre, lo que puede ser responsable de enfermedades, como la aterosclerosis o enfermedades cardiovasculares, como el infarto de miocardio. Tiene unos efectos similares a otros fármacos como simvastatina o rosuvastatina, lo que habitualmente se conoce con el grupo de las estatinas.
Las estatinas impiden la síntesis de colesterol por parte de nuestro hígado, disminuyendo así sus niveles. Además, van a reducir ligeramente los niveles de triglicéridos, otro lípido a tener en cuenta.
La atorvastatina está destinada al tratamiento de la hipercolesterolemia, así como, también para la prevención de enfermedades, como la angina de pecho el infarto de miocardio o el ictus.
En el mercado aparece normalmente comprimidos con dosis de 10 a 80 miligramos. Normalmente se recomienda iniciar el tratamiento con dosis mínimas de 10 miligramos diarios, aumentándolas progresivamente, hasta aquella dosis que nos permite alcanzar los efectos deseados. Nos aconsejan no superar dosis de 80 miligramos diarios.
Normalmente, las dosis se administran en una única toma, a cualquier hora del día, su administración puede hacerse junto con alimentos o con el estómago vacío. En general suele ser bien tolerada y las reacciones adversas más habituales son de tipo digestivo como, náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal, gases o estreñimiento.
Sin embargo. en ocasiones puntuales pueden dar lugar muy raramente a dos reacciones adversas muy graves, como pueden ser el daño hepático o la toxicidad a nivel muscular. Por tanto debemos consultar siempre a nuestro médico o farmacéutico, si durante el tratamiento con atorvastatina presentamos síntomas como, dolor o debilidad muscular, dolores abdominales sin causa justificada, aparición de una coloración amarillenta la piel o el blanco de los ojos o oscurecimiento de la orina.
La atorvastatina puede ver aumentada su toxicidad por un gran número de fármacos, como ciertos antibióticos, fármacos para el sida o antifúngicos. También, podemos ver toxicidad en personas que suelen consumir pomelo, por tanto, es muy importante que el paciente evite tomar medicamentos sin recomendación de su médico o farmacéutico. Y, por supuesto avisa a estos profesionales de que estás tomando atorvastatina.
Y, recuerda pregunta siempre a tu farmacéutico de confianza. Él te informará sobre los efectos y las dosis de atorvastatina y cualquier duda que tengas.
Recuerda, ante cualquier duda, acude a tu farmacia y consulta a tu farmacéutico.